dilluns, 13 de maig del 2013

DE VIAJE POR CARRETERA CON LA CANALLA

Cual Priscilla, reina del Desierto, emprendemos un pequeño viaje en familia.



El trío papá-mamá-hija se lanza a un viaje en carretera... no es la Route 66, pero es igual de interesante...



Con casi 5 años de nuestra pequeña, nos atrevemos a viajar en coche, durante 4 días para conocer nuevos sitios. La idea es ir parando cada noche en uno diferente.



Cuando nació nuestra hija me dije que la llevaría a todos sitios..., que viajaría y demás... pero tengo que decir que no he cumplido dicho cometido...



Viajar en coche con niños puede ser un suplicio, ya que como dice una amiga nuestra, alguna cosa les posee, cuando van postrados y atados en esas sillas de auto, a primera vista no muy cómodas, y llevados una vez en movimiento, sobre un artefacto de ruedas.



Algo nos dice que podemos intentar una kilometrada en combinación con posibles quejas de aburrimiento. 
La ilusión de viajar es muy grande y, de primeras, se la hemos contagiado a nuestra hija.



Comenzamos la ruta y ya en el primer peaje hacia el Norte comienza el suplicio (es curioso cuando una parada acentúa la queja). 
Hay que decir que el coche está condicionado con peluches y canciones de todas las películas infantiles que ha visionado habidas y por haber (de su época y de la nuestra) pero la reclamación viene a ser ésta: - Estoy cansada de estar aquí (menos mal que no está en la Titan Desert, eso sí que debe de ser cansado) -Mamá, tengo el cuerpo caliente, creo que voy a vomitar (pero si te he levantado a las 6 y te he dejado sin desayunar, qué mala madre!!).




Hemos intentado salir a las 5 de la madrugada, pero no sabemos cómo, hasta las 7, no hemos podido hacerlo por preparativos y demás (el tiempo en estos menesteres se vuelve en contra de uno).



En medio del comienzo del suplicio, y enfadada, nos hace preguntas del tipo -¿de donde sale la niebla? y bueno piensas -y ahora qué le digo para que no siga enfadada (bajo experiencias pasadas es bien sabido que hay que saber responder y resolver la duda de manera satisfactoria ya que el interrogatorio puede convertirse en cuatriple interrogatorio y bajo este contexto de "posesión" es mejor resolver el enigma de primeras).



El bloqueo de la madre comienza a ascender y se pone a escribir a su lado... Cuando va por las primeras líneas de este relato la hija ya se ha quedado dormida y al cierre de éste, la oye reír porque estará soñando, seguro, con aquél unicornio de peluche, el cual insiste que le regalemos para su cumpleaños.

La Canalla Té Plans :)  

p.d. dedicamos este post a nuestra amiga Esther    ;)

p.d. 2 Ya han pasado unos días de esta vivencia y hoy de nuevo en el coche hemos podido vivir que la Colección Bien Etre de música, amansa antes del sueño no solo a los niños sino también a padres y madres

1 comentari:

  1. Mucho animo con vuestro viaje por carretera. Seguro que lo pasáis genial a pesar de esos momentos de posesión. Jejejejeje

    Como anécdota te contaré que nosotros una vez tardamos 7 horas y media en llegar a Madrid cuando lo normal es hacer el trayecto en 4 como mucho. Pero con niños ya se sabe.
    Un abrazo. :)

    ResponElimina